ATOPOTATOS
Rafael Hidalgo, filósofo, novelista y youtuber de éxito, que tiene un blog, entre encantador y entrañable, cuyo título ya es de por si toda una declaración de principios ( https://polizonynaufrago.blogspot.com/ ) una vez escribió sobre el concepto de atopotatos, ese sentimiento de sentirse forastero, outsider, que uno puede a veces tener, de no ser del lugar, de no encajar en su mundo o en su tiempo.
Curiosamente quienes reflexionan sobre el bienestar vital suelen remarcar la idea de sentirse acogido, de encajar, de encontrar el sitio de uno, lo que es todo lo contrario de ser un atopotatos. Yo reconozco que mi forma de entender la vida, mis valores e incluso mis inquietudes me convierten en un atopotatos, pero a veces pienso que en el mundo lo raro es no serlo.
Un psicólogo, Ramón Nogueras, en una conferencia ironizaba sobre la frase incial de la novela Ana Karenina "Todas las familias felices se parecen unas a otras, pero cada familia infeliz lo es a su manera " y explicaba que cuando recomendaba a alguien un libro en que contaba todas la desgracia de una persona, sus pacientes solían decirle que se sentían identificados y era según el psicólogo porque realmente todas personas infelices se parecen unas a otras y las felices lo son cada uno a su manera.
Cada cual disfruta de su felicidad como puede y de la infelicidad como le dejan.
ResponderEliminarUn saludo.
Pues tienes razón la verdad
EliminarYo creo que todos somos un poco "atopotatos" jaja ¡ vaya palabra más curiosa! me gusta ; ) según en qué ambientes y momentos...encajamos entre los que sienten parecido a nosotros y somos raros entre los que sienten diferente, lo terrible es no encontrar a nadie que comparta tu sentir, ser un atopotato constantemente y en todos lados. Pienso como tú, la infelicidad uniformiza y la felicidad -muy diferente de la alegría-, es tan subjetiva que cada uno la experimenta a su manera... ( creo que la primera y la segunda frase en negrita del segundo párrafo dicen lo contrario : )
ResponderEliminarAbrazo fueerte que te quite la sensación de atopotato aquí en tu casa...yo me siento súper agusto aquí , nada atopotatada ; )
ja ja, María eres genial, "atopotatada" todo un acierto de palabra que hago mia.
EliminarPerdón quise decir del tercer párrafo... como voló el comentario, no sé si escribí el segundo...
ResponderEliminarSe entendió perfectamente, ayer no te pude contestar a tiempo porque estaba con un recurso.... (tú me entiendes)
EliminarGracias por el
ResponderEliminarenlace, Joaquin .
Coméntale si puedes y te apetece, siempre contesta, es muy agradable y también contesta los correos. Un abrazo
EliminarSentirse acogido en un sitio elegido o aportado por la vida y sus circunstancias es lo que nos entrega aquel concepto llamado felicidad. Lo de ser atopotato pienso que de alguna forma lo somos cuando no logramos encontrar ese sitio que es único. Lo que para mí es maravilloso para un otro puede ser irrelevante.
ResponderEliminarAbrazos Joaquín
Quizá vivir sea buscar ese sitio en que como piezas de un puzzle encajamos, y quizá como dejó dicho Cervantes en el Quijote sea mejor el camino que la posada. Muchas gracias por pasarte
EliminarAsí me siento yo todos los días de mi vida desde que existo.
ResponderEliminarUna vez leí "Cada 29 de mayo me acuerdo que es el aniversario de la caída de Bizancio y tengo ganas de decírselo a un amigo, luego recuerdo que por cosas como estas no tengo amigos", estoy agradecido por tenerte como amigo y poder comentarte cada 29 de mayo que es la caída de Bizancio. Feliz cumpleaños con retraso
EliminarCurioso término amigo mío, y sin embargo, a la vez, familiar en cuanto a sentirlo. En más de una ocasión me he sentido como tú dices, diferente. Pero siempre digo que en la diversidad es donde está la originalidad. Besos :D
ResponderEliminarMuchas gracias Margarita, tengo en gran valor, y comparto , todo lo que dices y escribes.
EliminarPues yo me siento atopotatos a veces y otras no. Lo entiendo más como una emoción pasajera que como un estado perenne. Por supuesto que no me siento a menudo como mucha gente de mi entorno. Pero si hago un esfuerzo mental por encajar lo consigo el rato que necesito para no caer muy gordo. No siempre es posible. A veces estás tan fuera de lugar que lo mejor es marcharte pero por norma general no es tan difícil estar a buenas con el prójimo razonable(el irracional no merece ni el intento).
ResponderEliminarSea como sea es inevitable sentirse de otra época. En mi caso de otra realidad. No conozco una época en la que yo me vea encajando del todo. Tal vez exista el multiverso de la ficción. Saludos
P.D. Interesantes las recomendaciones del youtuber.
Je je, tengo la impersión de que incluso cuando estás integrado perfectamente hay un alguien dentro de ti (un pequeño Sergio) mirándolo todo con cierta sonrisa exceptiva
EliminarUna curiosa palabra!!.
ResponderEliminarCoincido contigo en que el blog de Rafael Hidalgo es estupendo. Y, además, una persona muy agradable.
Un abrazo.
Feliz fin de semana.
Rafael es un verdadero pensador a contracorriente, y me consta que lo conociste en la feria del libro, cuando te firmo esa preciosidad de obra infantil al que le dieron un premio Elia Barcelo. Un abrazo Amalia
EliminarEn este sentido siempre me he sentido afortunada pues al vivir en bastantes ciudades a causa de la profesión de mi padre primero y luego a otras circunstancias imprevistas que nos suele dar la vida, siempre me he sentido acogida y fenomenal en todos los lugares en los que me ha tocado vivir.Saludos
ResponderEliminarMe alegro Charo, tu riqueza vital no es ajena a tu simpatía y tu actitud ante la vida. Saludos
EliminarLa palabra no la había oído nunca. Mala es la sensación de no sentirse aceptado y eso que en un momento u otro de la vida creo que nos pasa a todos, lo mismo que la similitud entre las familias felices y las infelices, al final todo depende del color con que se mira la vida.
ResponderEliminarMuchos besos.
Muchas gracias por tus com entarios, a i la palabra me gusto fuera de que la consideron pura cacofonía, tengo en grana precio a Rafael Hidalgo el filosofo, bloguero y el contexto y sus razones en que me presentó el término me hizo sentirme identificado, pero es cierto que la vida está llena de recovecos y nuevos pasajes y paisanajes, y que como decía CS Lewis un estado de ánimo no es una garantía. A mi me gusta esa frase de "según y conforme" que refleja la sabiduría exceptica de la gente del campo,
EliminarEstoy como Montse, la primera vez que leo lo de atopotatos.. si es que siempre se aprende algo.
ResponderEliminarAfortunadamente cada día está lleno de novedades, yo disfruto mucho siguiendo tu blog con tantos productos novedosos que sé que nunca voy a disfrutar pero me siento afortunado de vivir en un mundo donde son posibles.
EliminarHola Joaquín. como siempre tú y tu "mucha tela que cortar". Empecemos: No me gusta esa palabreja, pues no entiendo su etimología, lo que sí entiendo —porque lo he vivido— es saberse extranjero en tu propia tierra. Te cuento. Crecí y hasta me formé como profesional universitario, en un país con problemas, como cualquier otro, pero donde la Democrácia se respiraba, el asunto es que, al igual que la felicidad, NO SABES QUE LA TIENES HASTA QUE LA PIERDES. De hecho, en un momento, la única democracia sólidad de América Latina era Venezuela. Pero cuando llegó al poder el chavismo, comenzaron a producirse cambios tan radicales, que el país se convirtió en una dictadura seudo constitucional y eso también se respira, porque está en el aire. Entonces, por décadas, me sentí viviendo en una cárcel, al punto que, cuando emigré, estaba tan desesperado por salir de esa cárcel, que cuando vi la bandera de la esfera y el rombo en el puesto fronterizo, me sentí, no solo protegido sino también liberado. De hecho, eso me hizo recordar a una familia alemana que conocí siendo un crío, y ellos fueron a visitar a su familia a la RDA, la Alemania Comunista y al volver en barco, dijeron que cuando la bandera venezolana fue izada en aguas territoriales, ellos sientieron un alivio y una felicidad grandísima. Si no había entendido esto de manera intelectual cuando nino, ahí en la frontera con Brasil, lo sentí, pero en carne propia y me volví a identificar con lo vivido por esos alemanes en la década del 60 del siglo XX.
ResponderEliminarAhora bien, apartando el hecho político, te cuento que en mi vida personal también me siento así. Mi afición por la Literatura y la Historia me hace ser un extrano dentro de los círculos sociales donde me muevo.La razón es que, casi nadie tiene esas inquietudes. He publicado tres libros de cuentos y no tengo a nadie para decirle "compra este libro" sencillamente porque sé que no lo van a leer, es más, no les interesa. Pero hay gente como tú que, a pesar de estar tan lejos, la siento más cercana que mis propios familiares. Esta es otra acepción de la fulanita palabra. Tú, respondiéndole a DANIEL, lo has resumido muy bien en una cita: "Cada 29 de mayo me acuerdo que es el aniversario de la caída de Bizancio y tengo ganas de decírselo a un amigo, luego recuerdo que por cosas como estas, no tengo amigos",
Me apunto para avisarte el 29 de mayo
EliminarSi sentir que encajas poco o nada en este mundo, en que tu felicidad está hecha de momentos y la infelicidad no te la buscas, sólo te llega, te arrolla, pues sí, soy atopotato ¿o atopotata?.
ResponderEliminarSaludos
Muchas gracias Eugenia, por comentar, la vida es siempre momentos (pero no instantes) por eso es importante "marcar las pautas y no alargar los finales". Un saludo
EliminarComo defines el blog se hace necesario ir a conocerlo.
ResponderEliminarPor mucho tiempo pensé que la infelicidad se concentraba en localidades, en mi familia había disfuncionalidad, también en la casa de al lado, la de enfrente, los vecinos del otro lado, los de más allá y así, parecía un cerco que habían colocado para mantener a ciertas familias en conjunto, luego me di cuenta que yo era el bicho raro y me sentía fuera de lugar en todas partes.
"Atopotatos", la palabra es adorable, diría que se siente tierna, Joaquín.
Esa imagen del cerco de las familias infelices es hermosa porque implica que bastaría cruzar una línea, tocar una puerta y que te habrán y permitan el acceso para dejar de ser desdichado si uno lo es. Hay cierta poesía en esa idea. La palabra es tierna porque los topos siempre son tiernos con esa imagen de adorables animalitos medio miopes. Gracias por pasarte.
EliminarYo también lo creo... "cada uno es cada uno y cada uno tiene sus cadaunadas..."
ResponderEliminarCreo que lo dijo Unamuno...
Añado... cada uno brega con sus circunstancias, las propias y las que le rodean.
Besicos.