El Conquistador
Si hay un rey en la historia de España que merece ser recordado es sin duda Jaime I, conquistador de dos reinos, pues no en vano su nombre es el mismo que el del Santo Patrón de España Santiago.
Movido por esta convicción me metí de lleno en la lectura de la novela El Conquistador de José Luis Corral. 700 páginas apasionantes que me han acompañado en mis horas de desvelo.
Del autor recordaba con pena no haber leído su vida de El Cid que estaba por mi casa pero para la que nunca tuve ocasión. Curiosamente en esta novela he descubierto que la espada de Jaime I era la Tizona, de igual nombre que la de El Cid, y que quizá fuera o no la misma, nunca se sabrá.
("[...] cuando señoras son sus hijas de Navarra y Aragón. Hoy los reyes de España sus parientes son", así termina el Cantar del Mío cid, sabemos que existía vinculación entre ambos a través de la hija de Cid María Rodríguez y el recuerdo del castellano debió de estar muy presente en la toma de Valencia)
El estilo de la novela es ameno aunque no perfecto, lo mismo despacha en dos líneas una batalla que se tira una página larga para comentar con inusitado e innecesario detalle un escarceo amoroso (por usar un término romántico aunque inexacto) del rey con una joven doncella.
Novelar una vida es siempre difícil, porque no suelen responder a una estructura típica de planteamiento nudo y desenlace, y porque las personas no solemos ser precisamente coherentes ni consecuentes sino repetitivas, aburridas y contradictorias.
Aceptando estos condicionantes embarcarse en la vida del viejo rey, longevo en años y en reinado es sin duda apasionante aunque las reseñas del libro por alguna ignota razón parece que se centran en remarcar y cito literalmente "imprescindible para comprender la configuración de la España contemporánea y rebatir, con el rigor del relato histórico impecablemente documentado, el mito independentista de la mal llamada «Corona catalano-aragonesa»". (¿?)
Tras leer el libro y como habitante de territorios que fueron de la Corona de Aragón (que no del reino) no entiendo por qué aparece esa frase en la reseña del libro.
No la veo ni pertinente ni justa para el libro ni para el Rey.
Evidentemente las coronas que compusieron España, bien fuera la de Castilla o la de Aragón, no se limitaban a los reinos de homónimos: la de Castilla incluía reinos distintos como el de Galicia, León, Jaén, Murcia Granada, posteriormente Navarra, por no contar con diferentes señoríos como los vascos, la de Aragón incluía Aragón los condados catalanes, posteriormente Valencia y el Reino de Mallorca, además de otros en Italia)
Jaime I fue un rey que amaba Cataluña de la que llegó a decir que era el mejor reino de España (sí, le llamó reino aunque no en un sentido jurídico sino como hoy hablamos de país sin referirnos a un Estado) y la lucha contra los musulmanes la enmarcaba en un salvar a España, que parece confirmar que sí existió un sentimiento de reconquista (mal que le pesara a Ortega y Gasset), y parece que tenía cierta inquina a Aragón por lo mal que se lo habían hecho pasar en varias ocasiones.
En todo caso, como buen rey de su época tenía un sentido patrimonial de sus dominios y en el libro se pierde la cuenta de la cantidad de veces que cambió de testamento fragmentando sus dominios entre sus hijos.
Creo que esta novela es un libro recomendable para entender la Edad Media Española y el sentimiento de cruzada de aquel rey educado entre templarios. Sin duda, leer novela histórica sigue siendo, para conocer la historia, la mejor manera de "instruir deleitando".
Hay libros que debemos desemporvar.
ResponderEliminarGracias por comentar
EliminarGracias por ser tan gentil con tus comentarios
ResponderEliminarBonito blog tienes
gracias
EliminarEs necesario regresar de vez en cuando a nuestras raíces y conocer de dónde venimos. Volver a la historia para entender. Gracias, Joaquín.
ResponderEliminarMil besitos.
Gracias
ResponderEliminarLa "inquina a Aragón" que dices se la tenía por las muchas limitaciones que encontraba en los fueros aragoneses. Por eso creó el Reino de Valencia, para el que creó unas leyes que daban mucho más poder al Rey que en Aragón (Joan Fuster dixit).
ResponderEliminarEn el siglo XIX los liberales idealizaron los fueros aragoneses como un fundamento histórico del liberalismo. Incluso se inventaron que en los nobles aragoneses hacían en las Cortes un juramento de lealtad al Rey que decía: "Nos que valemos cada uno tanto como vos y todos juntos más que vos..." Eso es una invención del liberalismo del XIX, pero se basa en una realidad: las leyes aragonesas le tocaban mucho las narices a los reyes (recuerda como Antonio Pérez se refugió allí huyendo de Felipe II). Y Jaime I que tantas veces pasó apuros porque como todos los grandes estaba siempre en el filo de la navaja entre el éxito y el desastre, debió sentir muchas veces que aquellos mañicos orgullosos no ledaban todo el apoyo que necesitaba.
Efectivamente la tradicion pactista de Aragón chocaba con la concepción patrimonialista del Rey. Los fueros que le dió a Valencia no solo le daban poder al rey sino que pretendía limitar lo que se conoció como la recepción del derecho romano los juristas de Bolonia habían introducido en Europa, este derecho romano justinianeo era un derecho no estatal y tampoco era un derecho consuetudinario, sino fruto de la necesidad de los mercaderes te comercial y tener normas lógicas en los diversos territorios era un freno por tanto el poder real con los fueros Jaime I pretendía sentar que él era el rey y que era quién dictaba la ley.
EliminarEn tiempos de los Austrias los aragoneses fueron mucho más celosos de sus fueros medievales que los catalanes por eso llegaron a enfrentarse a Felipe II con intención incluso de constituirse en una republica oligarquica a la italiana. La lista de virreyes en Cataluña de origen castellano es larga mientras que en Aragón para ser rey virrey había que ser aragonés.
ResponderEliminar¡¡cómo han cambiado las cosas en ambas regiones!!
ResponderEliminarPara entender a España hay que entender la vertical. Y los catalanes ya tenían sus propias compañías en tiempos de los tercios. El sentimiento de reconquista era más religioso que patriótico, pienso. Me cuesta creer que alguien va a luchar por su patria sin creer en Dios.
ResponderEliminarLas patrias son los nuevos dioses
EliminarNo se mucho de tu tierra pero me encanta lo que escribes
ResponderEliminarTengo pendiente leer este libro.
ResponderEliminarCuriosamente la ludda de los libros pendientes siempre es mayor que la de los leídos ;)
EliminarDel mismo autor, en colaboración con su hijo Alejandro, quizá te interese una novela sobre otro rey medieval, bastante menos conocido que el Conquistador pero muy pintoresco. Se titula Batallador, por Alfonso I de Aragón, llamado el batallador porque era un amante incansable de la guerra. Era rey de Aragón y de Navarra y al casarse con Urraca, reina de Castilla y León, unió todos los reinos peninsulares ¡¡tres siglos antes de los Reyes Católicos!! Adoptó el título de Emperador de todas las Españas.
ResponderEliminarSi Urraca y Alfonso hubieran tenido un hijo habría sido el primer Rey de una España reunificada. Pero no hubo descendencia, el matrimonio se rompió y con él la unidad de los reinos.
Era un hombre de caracter muy difícil, con un talento especial para la guerra (llegó hasta Granada, de nuevo antes que los Reyes Católicos) pero incapaz de consolidar sus conquistas. Todo lo ganó y todo lo perdió. Y a su muerte, sin hijos,no tuvo mejor ocurrencia que dejar el Reino de Aragón en testamento a las órdenes militares (templarios incluídos). ¡¡Qué extraño habría sido un reino así, una teocracia militar!! Creo que habría sido un experimento único en la Historia. Pero los nobles aragoneses no estaban por la labor, claro. No aceptaron el testamento del monarca, sacaron a la fuerza a su hermano del monasterio en el que vivía como un monje feliz y le obligaron a ser rey y ha engendrar descendencia que asegurara la continuidad del reino.
Fue como en 1808, cuando la nación no quiso reconocer la abdicación del Rey en José Bonaparte: la corona no es patrimonio de un hombre.
Me lo apunto, veo que está en ebiblio
EliminarJe, je... quizás por eso la lista de libros pendientes es mayor que la de libros leídos, como dices. Cada lectura interesante nos revela nuevas lecturas que antes desconocíamos. Como dijo alguien el conocimiento es como la superficie de un globo, cuanto más crece más espacio va dejando debajo.
ResponderEliminarGracias por la reseña. Se ve interesante lo tendré en cuenta te mando un beso. Enamorada de las letras
ResponderEliminarGracias
EliminarUn gran historiador J.L. Corral. Éste libro está entre los pendientes.
ResponderEliminarA mí me gustó mucho "La Prisionera de Roma".
Lo buscaré. Gracias por comentar
EliminarAlgun dia lo leeré
ResponderEliminarParece muy bueno
La historia de España es apasionante, pero somos tan catetos que ni siquiera sabemos sacar partido de ella ni para no repetir errores (eso parece demasiado complicado) ni como hilo conductor de series y películas.
ResponderEliminarCreo que es una buena recomendación lectora ¡anotada queda!
En cuanto a tu duda yo creo que sí que eran conscientes de su estado, pero que antepusieron el negocio a la salud. Es lo que tiene llevar más de 15 años lidiando con la (misma) gente, que acabas conociéndola. Supongo que pensaron que con mascarilla no pasaría nada, pero pasó.
¡Besos mil!
Menos mal que no ha pasado a mayores, si algo nos enseña la historia es que los egoísmos y la cortedad de miras son la causa de las mayores catástrofes
EliminarGracias Por tus bellas palabras. Cuando algo se termina se termina para siempre y sabes por que???
ResponderEliminarporque la gente
No Cambia
besos
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarHe oído hablar mucho de este escritor pero admito no haber leído nada suyo. Y es cierto lo que comentas sobre la dificultad de novelar una vida. Yo leo mis diarios y no sabría como novelarme ni a mí mismo. Contradictorio y repetitivo dices... Tal cual.
ResponderEliminarEspero que su narración histórica se haga desde la documentación y no desde la emoción. En Historia cada día hay más política y menos verdad. Pero bueno, esto es una novela y lo que cuentas abre el apetito lector. Saludos
Estoy totalmente de acuerdo con lo que dice Sergio por eso hago mención de que la reseña con la que la publicita no se ajusta la novela que me parece bastante ecuánime amena y entretenida. Gracias por comentar. Un saludo
EliminarNice article, thank you very much! I love yor blog. I follow you. Please follow me back: beauty4fem.blogspot.com Nice to meet you, Victoria
ResponderEliminarHay libros muy interesantes.
ResponderEliminarUn abrazo.
No todos los libros interesan pero realmente los que sí son interesantes hacen el mundo algo más habitable
EliminarHola Joaquin. Muchisimas gracias por visitar mi pergamino de sueños escritos. Me quedo por aquí :D
ResponderEliminarGracias Margarita. Tu pergamino es apasionante
ResponderEliminarMuchas gracias por tus palabras. Conocer la historia es apasionante el riesgo es caer en el provincianismo, por eso a mi me gusta leer también la de otros países y tiempos.
ResponderEliminarTe agradezco mucho tu amable comentario en mi blog.La Historia de España es fascinante y no dudo de que el libro que mencionas tiene que estar muy bien.Saludos
ResponderEliminarMuchas gracias. un saludo
EliminarNada se de España tampode de la Argentina solo conozco europa y los EEUU
ResponderEliminarMuy buen texto
Me levantas los sentimientos cuando escribes y comentas Como todo buen escritor eres unico en el planeta
ResponderEliminarHola: Estoy recorriendo tu blog y me encanta. Y me has dado una idea para comprar un libro. Tengo yo un word con los libros que quiero. Y he apuntado este libro, que tiene una pinta estupenda
ResponderEliminargracias, me gusta eso de recorrer, quizá un blog sea una geografía en cierta forma
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